Aliskair Lasnibat

La objetividad se nos plantea como el ideal en el cual todo buen informador o reportero debe de plasmarse, ya que mediante la objetividad del reportero se nos muestra la verdad de un hecho o nota.
La objetividad se nos plantea también como un hecho exacto y cierto sobre un acontecimiento por parte de una rectitud intachable y una reflexión consciente del comunicador.

La objetividad absoluta no siempre es posible en la práctica pero se tiene que haber una objetividad o reflejo de la realidad para que el informador se considere éticamente con derecho a informar los hechos.

A lo largo de varios textos se nos plantea la posibilidad de que si la Objetividad seria posible o no, ya que los hechos humanos que ocurren a cada momento en el mundo tendrían que darse a conocer pero esto resulta prácticamente imposible debido a la gran cantidad de información que es y es cuando se entra en la duda sobre la objetividad, ya que solo nos muestran una parte de toda la información recaudada siendo esta la mas importante y es aquí cuando no se maneja la objetividad ya que se hace una selección de noticias que se darán a conocer y al hacerse esto se nos esta excluyendo de cierta información en lo cual se pierde la objetividad; además de que la información que se publica tiene que ser complementada, certifica y corregida para su publicación y es ahí cuando nuevamente se pierde cierta objetividad de la noticia.

La noticia se refiere a un hecho de verdad o cierta realidad, pero se dice que hay muchas realidades o verdades como la intelectual y la sensible.
La verdad sensible se da cuando el hecho del que se nos informa se encuentra entre la realidad y los sentidos y la verdad de inteligencia se da cuando el resulto es intelectual el cual se da de manera objetiva respecto a los hechos.

Por otra parte han existido situaciones en las que mantener la objetividad es prácticamente imposible como en el caso de la impersonalidad de la noticia que se impone o por ser resultado de una empresa o simplemente por que esta ausente en un yo individual, lo que nos lleva a otro punto, el “Yo” en el periodismo, por que aparentemente en el periodismo se han acumulado demasiados recursos para que se dispare la sospecha de que el “Yo” del periodista es el que impone un versión no objetiva.

En conclusión podemos decir que el buen informador aspira siempre a poder decir al público la verdad sobre hechos, acontecimientos o ideas que ocurren con el mayor grado posible de objetividad.